WeCreativez WhatsApp Support
Ejecutivo de Ventas
Bienvenido a Proense

La Automedicación

Definición:

La automedicación es la utilización de medicamentos por iniciativa propia sin ninguna intervención por parte del médico (ni en el diagnóstico de la enfermedad, ni en la prescripción o supervisión del tratamiento), exponiéndose a intoxicaciones, interacciones no deseadas con otros medicamentos o enfermedades del paciente, y la pérdida de efectividad de los principios activos de las medicinas. La automedicación en un hábito común en nuestra sociedad que puede ser conveniente si se utiliza para tratar síntomas menores.  

Los medicamentos más demandados para automedicación son:

Analgésicos:

Las cifras disponibles sobre el consumo de estos medicamentos nos indican una exposición masiva de la sociedad a los analgésicos en todos los grupos de edad y para una amplia muestra enfermedades.

Cuando se abusa de estos fármacos o se utilizan de forma indiscriminada sin control por un profesional pueden ocasionar efectos adversos graves relacionados con el aparato digestivo o riñón.

Antibióticos:
Los antibióticos son solicitados por los propios pacientes en la consulta, incluso a pesar de un diagnóstico médico infeccioso que no precisa de su uso, en estas circunstancias de uso, el antibiótico pierde su efectividad ante una nueva y precisa indicación.

NO SE DEBEN UTILIZAR ANTIBIÓTICOS SIN ESTAR PRESCRITOS POR UN MÉDICO:

“Usándolos bien hoy, mañana nos protegerán.”

Otros medicamentos también utilizados como automedicación:

  • Antisépticos tópicos
  • Suplementos vitamínicos y minerales
  • Antigripales y antitusígenos
  • Digestivos, laxantes, antiácidos y antiflatulentos

Debemos recordar que aunque los medicamentos de venta libre tienen menos riesgos, no están exentos de ellos y hay que utilizarlos con precaución.

Riesgos de la automedicación

La automedicación sin control médico o farmacéutico comporta una serie de riesgos para la salud que en la mayoría de los casos son desconocidos por los ciudadanos:

  • Toxicidad: efectos secundarios, reacciones adversas y en algún caso intoxicación.
  • Falta de efectividad, porque se utilizan en situaciones no indicadas. Por ejemplo, la toma de antibióticos para tratar procesos víricos contra los cuales estos medicamentos no son efectivos.
  • Dependencia o adicción.
  • Enmascaramiento de procesos clínicos graves y consecuentemente retraso en el diagnóstico y tratamiento.
  • Interacciones con otros medicamentos o alimentos que la persona esté tomando. Puede haber una potenciación o una disminución del efecto del medicamento.
  • Resistencias a los antibióticos. El uso excesivo de antibióticos puede hacer que los microorganismos desarrollen mecanismos de defensa delante de estos medicamentos de manera que dejan de ser eficaces.

 

Responsabilidades

¿De quién depende la responsabilidad de la automedicación?

. Del usuario: porque lo adquiere sin prescripción médica

. Del comerciante: vende sin exigir receta.

. De la propaganda: incentiva el consumo

. Del Estado: no tiene control necesario y limitado acceso a los servicios de salud

 

Uso racional y consulta al médico

Si no puedo dar respuesta a las siguientes preguntas, la mejor opción es consultar al médico.

. ¿Qué enfermedad o dolencia tengo?

. ¿Debo curarme con medicamentos?

. ¿Qué medicamento es más seguro y eficaz para iniciar el tratamiento?

. ¿Tengo antecedentes de alergia que contraindique el uso del medicamento?


Estos riesgos se pueden evitar siguiendo unos consejos básicos sobre la automedicación:

  • No tome ningún medicamento, sin que haya sido prescrito por un médico.
  • En caso de embarazo, lactancia materna, presencia de enfermedades crónicas o bien si se trata de niños, consulte siempre al médico antes de tomar algún medicamento.
  • La duración de la automedicación tiene que ser razonable. Si los síntomas continúan o su estado empeora consulte a su médico.
  • Informe a su médico/s de todos los medicamentos que toma o ha tomado (también hierbas medicinales, vitaminas, suplementos dietéticos, homeopatía, etc.).
  • Lea y conserve el prospecto de todos los medicamentos. Es importante saber que se toma, para que se lo toma, como y cuando se lo toma.
  • Conserve los medicamentos en su embalaje original. Éste contiene información importante como la caducidad, el lote, si se debe guardar en nevera, etc. Además el embalaje protege el medicamento y garantiza su adecuada conservación.
  • Evite el consumo de alcohol cuando esté tomando medicamentos porque puede afectar a su capacidad de reacción por ejemplo en la conducción de vehículos o en la realización de otras actividades peligrosas

Conclusión: Automedicarse tiene graves consecuencias. El uso irracional de medicamentos hace que se pierda su efectividad, provoca efectos adversos o crea dependencia, y enmascara síntomas.

Dr. Willy Quesada

Dr. Carlos Huayhualla